domingo, 31 de agosto de 2014

Historias cortas y cuentos... desde B-612

Comparto por estos lares mi Medium, espacio en que deposito de vez en cuando el más profundo y secreto fruto de mi mente enajenada. 

Daniel Collado (Dandan)

domingo, 24 de agosto de 2014

Regresa Doctor Who: Series 8 - Deep Breath

#‎Capaldi‬ no defraudó anoche en el regreso de ‪#‎DoctorWho‬. Qué opináis whovians?

Cuando algo se rompe, hay que recomponerlo y Steven Moffat es de esos de borrón y cuenta nueva y más aún de los que dicen "vamos a rehacerlo... y será más grande". Y en ello estamos, despidiéndonos aún del undécimo Doctor y esperando con ansia viva cataclísmicas dosis de epicidad.

Pero claro las cosas de palacio van despacio. Ya se sabe, despacito y con buena letra, así ha comenzado Moffat las andaduras de Capaldi, el duodécimo Doctor, uno que no reconoce su cara, un Doctor asustadizo, reseteado, confuso... pero nuestro Doctah. Dado la de meses que llevábamos esperando, tras el 50 aniversario y el especial de Navidad, ya no aguantábamos más y queríamos que el showrunner más controvertido de la BBC nos diese una biena ración de TARDIS.

Lo ha hecho bien? Para mí, sí. Pero aún queda mucho por delante.



Una Londres victoriana, una dinosauria fuera de su mundo, Clara mostrando quién manda, la Paternoster Gang (Madame Vastra, Jenny Flint, y Strax) y un misterioso cyborg ladrón de órganos... o no es un cyborg? Un robot que busca ser humano? Con millones de años de antigüedad? Un ser que se ha ido reconstruyendo pieza a pieza? Un dalek, un cybermen... estooooo... qué será será?


Y al final, dos simpáticos epílogos, uno que nos trae de regreso a un Matt Smith al que ya no se echa tanto de menos y otro con un nuevo y misterioso personaje, posible futuro antagonista, otra novia chiflada del Doctor... (ya vemos el perfil de mujer que te va Doc).

Así pues, Deep Breath supone un interesante y esperado reinicio con muchos nuevos frentes abiertos, piezas que encajan, viejos conocidos y nuevas caras... todo poco a poco, en su justa medida.
Como diría el noveno doctor... FANTASTIC!

(by the way, pic de mi amigo, el artista y también whovian, Elbert Or ^^)

miércoles, 13 de agosto de 2014

Análisis: Guardianes de la Galaxia

Quien esto escribe tuvo la oportunidad de ver esta película casi un mes antes de su estreno en cines españoles, lo cual permite que lo visto decante poco a poco para que la impresión de la cinta se afiance de modo claro. Esta es una práctica que me gusta, pues lo que se escribe, no está basado en la emoción instantánea que se nos genera a la salida de la sala de cine. Así, en ocasiones, una película que parecía genial en el momento, no parece tan buena el día después, tras analizarla un poco o ,más aún, un mes después.

No es el caso de Guardianes de la Galaxia, la nueva apuesta de Marvel Studios que llega de la mano del director James Gunn (quien, por razones obvias, ya ha sido fichado para dirigir una secuela), que ya se estreno en esto de los largometrajes fantásticos con Slither o Super! pero nunca había probado suerte en una superproducción.



Mi primer comentario tras el visionado de Guardianes de la Galaxia fue:

Gran peli marvelita, gran peli de acción, gran comedia, gran peli de ciencia ficción, de aventuras, retro... en general gran peli. Lo tiene todo, es fresca, novedosa y palomitera, qué más se puede pedir?

Varias semanas después mi opinión no ha cambiado para nada. Es más, estaba deseando que llegase el 14 de agosto para poder disfrutar de nuevo del filme, esta vez en castellano.

James Gunn dijo algo así como "Si Los Vengadores son los Beatles, los Guardianes de la Galaxia serían los Rolling Stones". Y no andaba desencaminado. Si el Capi, Iron Man y compañía han sido el grupo clásico que ha abierto la veda de caza de Marvel en el terreno cinematográfico, poco le tienen que envidiar Starlord, Drax, Gamora, Rocket Raccon o Groot. Descubramos con Guardianes de la galaxia a otro grupo superheróico que pega fuerte pero estos con un estilo diferente.

Las comparaciones a veces son odiosas, pero sólo a veces. Marvel abrió su Fase 1 con películas independientes de los distintos héroes que conformarían los Vengadores para luego reunirlos a todos muy inteligentemente bajo la batuta de Joss Whedon. Lo mismo ocurre en la actual fase 2 pero… espera! De repente hay otra película que relata las desventuras de un grupo de antihéroes que acaban por salvar el universo (sin quererlo siquiera). Y lo tenían difícil porque más alla de aquellos que somos lectores marvelitas, pocos conocen a Starlord y su recua de compañeros, involuntarios héroes unidos por el destino. Era una apuesta un tanto arriesgada por parte de la casa de las ideas. Y sin embargo, quizás ese desconocimiento, esa sorpresa, sea lo que ha hecho que los Guardianes hayan sabido hacerse su hueco en toda una nueva generación de adictos, no sólo a las pelis comiqueras, sino a las de ciencia ficción, las de aventuras, etc etc.

En el espacio profundo, Peter Quill, un humano abducido hace 26 años, es ahora Starlord, un cazarrecompensas que se ve envuelto en el robo de un importante objeto, el orbe. Esto le llevará a mezclarse con otra serie de asesinos y mercenarios que acabarán por encontrar junto a él su lugar en la galaxia y en la vida. Al otro lado del campo de batalla, un implacable Ronan el Acusador y Nébula, la hija de Thanos.

James Gunn ha estado no sólo tras las cámaras, sino también a los mandos del guión, esculpiendo las aventuras originales que se pueden leer en papel para adaptarlas a la gran pantalla. Los personajes siempre fueron harto interesantes, un humano adoptado por las estrellas, un asesinos que quiere vengar a su familia, la hija de un titán, un mapache y un árbol viviente… seres incomprendidos que no encajaban en este mundo de algún modo, que por separado no son nadie, pero que unidos logran encontrar su propósito. Gunn ha sabido aprovechar cada elemento de cada uno de estos personajes y darle un nuevo giro. Ahora son más humanos, más héroes, más cómicos, más de todo. Cada miembro del grupo bien podría representar una dimensión distinta del alma humana y con eso ha jugado Gunn, que los ha hecho suyos como Whedon moldeó su propia versión de los Vengadores.

En el aspecto visual, Marvel sigue apostando por un universo colorido, impecable y dinámico, otro reto en el caso de los Guardianes dado que estamos hablando de una película que transcurre, en su mayoría en el espacio, en naves, prisiones intergalácticas o cabezas de Celestiales (XD). Nada de la oscuridad que DC busca para su futura Batman v. Superman. Aquí lo que mola son los colores, los destellos, las explosiones… la música! Impresionante banda sonora, tanto la instrumental como aquellas canciones de los ochenta empleadas aquí, homenaje a toda una época (aquella en la que aún vive Peter Quill). El aspecto retro está por doquier, muy al estilo Marvel. Si en Iron Man destacan los hologramas y en Capitán América los engranajes y pistones, aquí, atención a los diseños de producción, interfaces de las naves y demás.

La de Marvel ha sido una gran apuesta de cara también a los actores que interpretarían a los galácticos personajes. Peter Quill es Chris Pratt alguien a quien no sólo estamos acostumbrados a ver en papeles más cómicos y relajados, nunca como héroe de acción, sino que además, ha pasado por la dieta Disney y se ha metamorfoseado de gordito gracioso a un tío mazado en cero coma. Gamora, asesina a sueldo e hija del titán Thanos (sí, aquel que sonreía desde el espacio exterior en la escena final de los Vengadores), es Zoe Saldana, habituada al espacio quizás tras sus papeles en Avatar o Star Trek, pero esta vez con piel verde. El psicopático Drax tiene los músculos del luchador Dave Bautista, gran decisión desde el punto de vista del entretenimiento. Dave se hace con el personaje y nos descubre una nueva versión del mismo. En VO, su voz resulta impresionante. Como impresionante resulta la profunda voz de Vin Diesel entonando los distintos "I'm Groot" de Groot, el "árbol viviente" del equipo, tan letal como adorable. Es una pena que en España no se pueda disfrutar de su interpretación, o más aún de la de Bradley Cooper interpretando al peludo y descarado Mapache Cohete/Rocket Racoon.

En el bando de los malvados? Lee Pace es el imponente Ronan el Acusador, Benicio del Toro el distinguido Coleccionista, Michael Rooker es un revisado Yondu y Karen Gillan interpreta a Nébula con soltura y gracia, tanto en su viz más cómica como en la más letal (vais a disfrutar, whovians). Y para los que querían más Thanos, Josh Brolin os tiene preparado un regalito en Guardianes de la Galaxia.

Además, Xandar, los Nova Corps (sin Nova), Korath, Djimon Honsou, Glenn Close y John C. Reilly… lo dicho, esta peli lo tiene todo. Un nuevo punto de partida para más aventuras dentro de la Fase 2 de Marvel y apuntando ya a la Fase 3 que no deja indiferente, que recuerda en cierto modo a la frescura de la trilogía original de Star Wars y que nos deja claro que los Vengadores no es el único supergrupo en este mundo.

Hooked on a feeling!! Un hurra por los Guardianes!

domingo, 3 de agosto de 2014

Análisis: Transformers 4: La era de la extinción

¿Qué te hemos hecho Michael Bay? ¿En qué te hemos convertido?

Como fan de los juguetes de Hasbro y seguidor de las diversas series de animación, cómics y películas de Transformers, me encuentro sumamente confuso. ¿Qué es Transformers 4: La era de la Extinción? ¿Es una secuela? ¿Un reboot? ¿Un remake?

Os diré lo que es en una frase: Es un espectáculo de fuegos artificiales de 3 horas de duración.

Es el siguiente paso evolutivo de Michael Bay, director del film. Un espectáculo audiovisual sin parangón de la mano de ILM y las cámaras 3D de Cameron, sumado al dinamismo (casi cercano al Parkinson) de los planos de Bay y aderezado con esa nueva tendencia de planos cortos, lens flares etc que tan de moda han puesto en el cine “blockbusteriano” seres como JJ. Abrams o Zack Snyder en su última Man of Steel.

La pirotecnia por doquier y los efectos CGI se ven además grácilmente acompañados por las más típicas, tópicas, paródicas y vacías frases que un actor (real o digital) haya podido jamás recitar. (Quien aquí escribe tuvo la oportunidad de ver la película en versión original y espera que los dobladores españoles hayan naturalizado un poco algunas de las líneas en el guión para hacerlas sonar menos forzadas).

El guión da para dos o incluso tres películas, pero ya se sabe, Bay se atiene a la fórmula de cuanto más mejor. Más personajes, más tramas entrelazadas, muchos nuevos conceptos, más explosiones… y el que mucho abarca poco aprieta. En un mundo que odia a los Transformers, un reducido grupo de Autobots y Decepticons lucha comandado por Optimus Prime, por sobrevivir a los humanos que quieren destruirlos. Pero todo cambiará cuando los humanos se alíen con una fuerza extraterrestre que también busca a Optimus, al tiempo que los humanos desarrollan sus propios transformers gracias al Cybertronium. Aquí hay chicha para todos.

Cómo echo de menos ahora la primera película, donde alcanzabas a conocer un poco más de cada autobot o decepticon, de cada personaje humano, de sus vidas, de sus intenciones. Aquí todo viene rodado (chiste autobot).

Mark Whalberg tiene poco que haber con este guión e incluso el grandioso Stanley Tucci queda limitado por los giros insulsos de la historia, dando tumbos a lo largo de esta sin un destino claro. Es cierto, es un punto a favor de esta Transformers 4 el haberse olvidado un poco de las personas y haberse centrado en los transformers como personajes principales. Esta es su historia, estos son sus problemas pero… ¿dónde quedaron los personajes humanos de las entregas anteriores? ¿Dónde está Sam Witwicky? Todos sabíamos que no aparecería por estos lares pero… ¿ni una mención siquiera por parte de Optimus a sus antiguos aliados humanos? ¿A sus aventuras como defensor de la justicia con el ejército norteamericano? ¿Dónde están Lenox, NEST y los militares que apoyaban a los autobots? Nada importa aquí. Y hay veces en que el trasfondo de anteriores entregas es requerido.

Bay trata de empezar de cero… pero no. Es un relanzamiento de la saga… pero no.

¿Y lo bueno? Os preguntaréis… lo bueno, como siempre es, que como buen fan uno puede contemplar de nuevo a sus juguetes favoritos cobrando vida, luciendo nuevos diseños y envueltos en espectaculares batallas (largas también). Los locos de la automoción alucinarán con los modelos de vehículos mostrados, los fans de la acción babearán con las explosiones. Bay hace pelis para todos… y quizás para ninguno. Eso sí, abre las puertas a nuevos universos relacionados con los Transformers, los dinobots, los caballeros de Cybertron… homenajes y pistas que podrían dar pie a nuevas tramas de cara a futuras secuelas, tramas que nos llevarían más allá de la Tierra y los humanos.

Es una pena que, siendo la película que más elementos de la mitología de los cómics y los dibujos animados ha empleado, quede todo un poco en agua de borrajas, diluído entre tanta batalla en una cinta tan larga. Más Dinobots, más transformaciones, más personajes de los de toda la vida y más Cybertron es la clase de epicidad que necesitamos y no tanta ciudad arrasada. De hecho, cuántas grandes ciudades quedan por destruir? Decían de Snyder y Zod en Man of Steel pero Michael Bay se ha cargado ya Chicago, medio Egipto, Mission City, Shangai, Hong Kong… sólo con los Transformers, quiere tener el récord.

En definitiva, Bay parece una parodia de sí mismo. Su estilo se ha visto plenipotenciado. Más cámaras hiperactivas, más destrucción, más mujeres florero y más metraje… pero aún así, la película está siendo un éxito de audiencias porque seguimos en la época de los robots gigantes que destrozan ciudades. Transformers, Pacific Rim… no deja de molar. Y al final, qué importan tres líneas de diálogo pésimas o la inconsistencia con anteriores precuelas si tenemos Dinobots dando caña? Pues eso. Transfórmense… ¡¡y avancen!!

viernes, 1 de agosto de 2014

Mundo Dandan: Amaterasu

A los otakus seguidores de Naruto les sonará la palabra. Amaterasu, según el kojiki, es una megami, nombre que reciben las Kami femeninas, las diosas. Amaterasu es la diosa de la que emana toda la luz,de ahí la técnica de Amaterasu, el fuego que todo lo arrasa que Itachi Uchiha empleó contra su hermano Sasuke en Naruto.